El mundo entero celebra el
día del Trabajador por aquellos mártires que Chicago vió. A los maquinistas, a
los industriales, oficinistas y comerciales, a esos que trabajan con tanto amor
para hacer de su vida algo mejor, para ganarle el sustento vestido y alimento a
su generación.
Nosotros queremos en esta
ocasión felicitarlos a todos con sobrada razón, en especial a esos que trabajan
sin receso en fábricas sin motor, sin chimeneas, sin combustión, son los
obreros de esta institución que con gran dedicación laboran con esmero en la
fábrica de sueños de la educación, que siembran cortesía día a día en su noble
labor y facilitan el trabajo del educador, para que cada estudiante tenga a su
disposición áreas limpias, listo el pizarrón y las áreas verdes como buen
pulmón, para que así estudien con mucho tesón porque son muy valiosos para la
nación.
A esos obreros de ésta
fábrica de sueños un abrazo sincero de todo corazón y gracias por ser nuestro
hermoso motor.
-----------
Autor: Alejandro J. Díaz Valero Maracaibo, Venezuela
No hay comentarios.:
Publicar un comentario